Las fiestas navideñas desde mi perspectiva

Pues eso, pilas recargadas, que no nuevas, que eso contamina mucho. Llevo sin publicar nada desde antes de nochebuena. No me he ido a ningún lado ni he tenido una vida social muy ajetreada que no me ha permitido conectarme, no, nada de eso. Son las fiestas, me gusta observar desde fuera, sin meterme mucho en ellas, mirar, ser invisible. Participar de la ilusión con mis sobrinas, hacer cosas en familia.....
.....estresarme con los regalos de reyes, puesto que soy la única sin hijos....¿adivinais quien ha hablado con los reyes personalmente para concretar los regalos navideños? Con esto de la crisis y que somos 7000 millones de almas en la tierra, los reyes me anunciaron recortes serios en los presupuestos (mira, como Rajoy!) para llegar a todos, así que claro....dale al coco.
...hincharme con las cenas, y no por comer (que también, eh?) sino porque alguien tiene que echarle una mano a mi padre en la cocina y en las compras, ya que a mi madre le ha salido un "apéndice" llamado Martita, (preciosa, la verdad. Es al arbolito de navidad de la foto de la entrada anterior) que no le deja hacer nada más que estar con ella. Y pensar que cenamos...uffff. Eso no me gusta nada, lo de pensar en las comidas. Creo que me voy a poner a régimen sólo (¿sólo? que mentirosilla soy, alguna razón más de peso habrá, jajaja) para que me digan qué comer cada día y no pensar. Luego empieza a preparar, a las 9 de la noche. Ahora, este año me he puesto el disfraz de mandona y me he metido en el papel a tope. Las niñas han colaborado, menos mal, además de ayudar no estan dando .... el follón, eso!. También como novedad este año he usado un anestésico llamado "Vino blanco Viña Albali", y oye...ha funcionado bastante bien.
Después de preparar, a cenar. Yo no ceno casi nunca, así que imaginaos, la mesa llena de comida, yo sin ganas de comer, con la sonrisa boba causada por el potente anestésico antes mencionado, la mala conciencia (si si, esa que te dice que no comas más, pero que también se diluye con el anestésico) adormecida, y ala! a hincharse como una ceporra.
Cuando ya no te puedes mover de la paliza que le has dado a tu estómago, llega lo mejor....¡recoger la mesa! Bieeeeeennnnnn! No puedo describir aquí lo que me gusta esa parte... o bueno si, yo la definiría como KK. Porque claro, hay que brindar con las copas buenas, y luego las copas buenas hay que fregarlas a mano que sino el lavavajillas se las carga, secarlas y colocarlas, mientras oyes de fondo a tu hermana cantar a dúo con su marido "La puerta de Alcalá", con el singstar de la play. Y es en esa tarea final de recoger todo cuando hay una estampida en la cocina, sobre todo del sector XY de la familia.
Este año rematamos la faena cantando. Hice un gran esfuerzo, me tomé un cubata, y canté la canción "Bohemian rhapsody" de Queen, ¿la conoceis?, pues eso. No lo hice bien, claro. Mi madre dice que tengo un oído enfrente del otro, y eso que me adora. El pobre Fredy se removió en su tumba y me lanzó un castigo al día siguiente en forma de resaca. No lo volveré a hacer hasta el año que viene, en la próxima nochevieja, después de otra botella de vino blanco, champán, cervezas y cubatas.
Y aquí estoy hoy, negociando los regalos que faltan, intentando pensar en algo para cenar el 5, preparando las tarjetas personalizadas para unir a cada alma con su regalito, intentando terminar a tiempo el regalo de santo de mi suegra, para el día 6 de enero, ultimando la próxima reunión con los amigos, .....
Y como todos los años pienso...¿pero a ti no te gustaba ser invisible en estas fiestas?, y me corrijo a mi misma el verbo, A mi me gustaría ser invisible estas fiestas.
Pero claro, no puede ser. No es momento de causar un cisma familiar, así que seguiré intentándolo.
Ah, por cierto. Felices Fiestaas. Feliz Navidad. Feliz año 2012!!!!
Besos